OKINAWA SEFA-UTAKI - UN LUGAR DE VERDADERA PAZ

 
Sensei Luis Lemos en Okinawa Sefa-Utaki - Septiembre 2005

Sefa-Utaki (   ) significa "lugar purificado de Utaki". Es un espacio sagrado histórico con vistas a la Isla de Kudaka, muy cercana a Okinawa, que sirvió como uno de los lugares clave de culto en la religión nativa de las personas de Ryukyuan durante miles de años.

Más tarde, como parte de la asimilación de Okinawa por el Japón se cambió para servir como el mayor Santuario Shintoísta y es parte de los sitio del Patrimonio Cultural Mundial de la UNESCO, como los sitios de Gusuku y propiedades relacionados del reino de Ryukyu en Nanjo.

 


Sefa Utaki se encuentra en la península de Chinen y ha sido reconocido como un lugar sagrado desde los primeros tiempos de la historia de Ryukyu. De acuerdo con con la historia de Chūzan Seikan, éste era el lugar donde Amamikyu (Diosa de la Creación) descendió a la Tierra. 

La zona en sí mismo comprende un santuario natural, con una una serie de cuevas y salientes que sobresalen de apertura hacia el este y el sur, entre imponentes formaciones rocosas de un alto promontorio sobre el mar. 

En la post-guerra todos los edificios han sido destruidos, pero los recintos exteriores e interiores todavía se pueden ver claramente.

Sefa-utaki (斎場御嶽) meaning "purified place of Utaki" is an historical sacred space, overlooking Kudaka Island, that served as one of the key locations of worship in the native religion of the Ryukyuan people for millennia.
Later as a part of assimilation of Okinawa by Japan, it was shifted to serve as a Shinto Shrine. It is part of the UNESCO World Heritage Site Gusuku sites and Related Properties of the Kingdom of Ryukyu in Nanjo, Okinawa.
 

Sefa Utaki is on the Chinen Peninsula, and has been recognized as a sacred place since the earliest period of Ryukyuan history. According to Chūzan Seikan, this was the spot where Amamikyu, goddess of creation, came down to Earth. 
 
The shrine area itself comprises a number of caves and overhanging ledges opening to the east and south among towering rock formations of a high promontory over the sea. All buildings have been destroyed, but the outer and inner precincts can still be traced.